El hot toddy es una bebida clásica que combina té caliente, miel, limón y un toque de whisky. Es sencillo, aromático y tiene ese poder mágico de relajarte al primer sorbo. Aunque muchos lo asocian con remedios caseros para el frío, la verdad es que también es la compañía perfecta para una tarde tranquila, una noche ventosa o cualquier momento en que quieras algo calentito y reconfortante.
Lo mejor del hot toddy es su simplicidad: ingredientes básicos, preparación rápida y un sabor que mezcla lo dulce, lo cítrico y lo especiado de una manera muy equilibrada.
Ingredientes (1 taza)
- 1 taza de agua caliente o té negro caliente
- 1 ½ a 2 oz de whisky
- 1 cucharada de miel
- 1 cucharada de jugo de limón fresco
- 1 rodaja de limón para decorar
- 1 ramita de canela o 2 clavos de olor (opcional)
Preparación
- Calienta el agua o prepara un té negro suave.
- En una taza grande, agrega la miel y el jugo de limón.
- Vierte el whisky y mezcla para disolver la miel.
- Añade el agua caliente o el té.
- Decora con una rodaja de limón y, si quieres, una ramita de canela o clavos para darle aroma.
Consejos
- Si quieres una versión más herbal, usa té de manzanilla en lugar de té negro.
- Ajusta la miel y el limón para que sea más dulce o más cítrico según tu gusto.
- Para una versión sin alcohol, simplemente omite el whisky y agrega un poco más de té caliente.
- Una gota de extracto de vainilla le da un aroma espectacular.
El hot toddy es simple, cálido y perfecto para entrar en modo relajación total.
