Una juez federal de Illinois (EE.UU.) rechazó este lunes bloquear de manera inmediata el despliegue de la Guardia Nacional en Chicago, ordenado por el presidente Donald Trump para responder a las crecientes protestas contra las redadas migratorias en el estado.
La magistrada April M. Perry anunció su decisión en una audiencia celebrada en Chicago, después de que el Gobierno de Illinois presentara una demanda contra la Casa Blanca para detener la movilización de 400 elementos de la Guardia Nacional en la ciudad.
En su querella, el Gobierno estatal y la ciudad de Chicago solicitaron una orden de restricción temporal para impedir que las tropas fueran desplegadas, argumentando que la medida vulnera la soberanía estatal y carece de justificación legal.
La juez pide más tiempo para evaluar el caso
Perry explicó durante la audiencia que necesita más tiempo para revisar los argumentos antes de emitir una resolución definitiva y fijó una nueva audiencia para este jueves.
Mientras tanto, el Gobierno federal confirmó que las tropas procedentes de Texas llegarán a Illinois entre este martes y miércoles, donde recibirán entrenamiento antes de comenzar sus operaciones.
Tensión entre Illinois y la Casa Blanca
En una conferencia de prensa, el gobernador JB Pritzker denunció la decisión presidencial, calificándola de “invasión anticonstitucional de Illinois por parte del Gobierno federal”.
“Los miembros de la Guardia Nacional están entrenados como soldados, pero se les está reclutando para algo que los convierte en policías sin tener la formación necesaria”, declaró el mandatario estatal.
Por su parte, el fiscal general de Illinois, Kwame Raoul, aseguró que las acciones del presidente “son ilegales” y afirmó que “ningún mandatario puede saltarse la Constitución”.
La demanda sostiene que la Administración Trump ha “excedido su autoridad” y que no existe ningún requerimiento legal que justifique la federalización y el despliegue de la Guardia Nacional en el estado.
Un contexto de creciente tensión
El despliegue ocurre mientras las protestas contra las redadas migratorias continúan intensificándose en Chicago, tras un incidente en el área de South Side, donde agentes de la Patrulla Fronteriza dispararon el sábado e hirieron a una ciudadana estadounidense.
Este fallo judicial se produce el mismo día en que otra juez federal impidió a Trump desplegar 300 elementos de la Guardia Nacional de California en Oregón, donde el Gobierno también buscaba responder a manifestaciones contra el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE).
