Una decisión inesperada sacudió este viernes el ambiente político en Estados Unidos: el presidente Donald Trump canceló la protección del Secret Service que tenía asignada la expresidenta Kamala Harris.
Tradicionalmente, los vicepresidentes reciben seis meses de seguridad al dejar el cargo. Sin embargo, el exmandatario Joe Biden había extendido ese período para Harris hasta enero de 2026. Trump revirtió esa extensión y ordenó que la protección concluyera el 1 de septiembre de 2025.
La revocación ocurrió justo antes de que Harris comenzara una gira de presentación de su libro 107 Days, que relata su campaña presidencial de 2024. Este anuncio la pone en la mira del escrutinio público sin el respaldo del servicio de seguridad federal.
Repercusiones inmediatas
Un vocero de Harris agradeció la labor del Secret Service, calificándola de profesional y comprometida.
El gesto del presidente encendió alertas entre varios sectores, pues se suma a una serie de medidas similares contra críticos políticos.
Mirando hacia adelante
Con agosto terminando, la cancela de la protección pone a Harris en una situación de vulnerabilidad adicional justo cuando su figura retorna al centro de atención mediática. ¿Cómo reaccionarán los aliados políticos y autoridades locales? El giro ya prende los focos de debate político y de seguridad pública en pleno ciclo electoral.
EE/MFR
