El árbol de Navidad más famoso de Nueva York ya está en casa. Este sábado llegó al Rockefeller Center el imponente abeto noruego que iluminará las fiestas de fin de año y que, como cada temporada, atraerá a miles de visitantes de todo el mundo.
El árbol, de 23 metros de altura, 14 de diámetro y 11 toneladas, fue donado por Judy Russ y su hijo Liam, de 7 años, quienes lo tenían en el patio de su casa en East Greenbush, un suburbio de Albany, al norte del estado.
Decenas de personas se reunieron para recibir el pino, fotografiarlo y celebrar el inicio no oficial de la temporada navideña neoyorquina.
“La Navidad es muy especial para nosotros. Es nuestra época favorita del año”, contó Russ, de 37 años, emocionada por ver su árbol familiar convertido en el símbolo más reconocido de la ciudad.
La historia detrás del árbol es también un homenaje. Judy propuso su abeto como candidato en memoria de su esposo, Dan Russ, fallecido en 2020 a los 32 años. “Dan siempre decía en broma que algún día nuestro árbol estaría en el Rockefeller Center. Me alegra haber podido cumplir ese sueño”, relató.
Un símbolo que brilla en todo el mundo
El árbol, que tiene unos 60 años, será decorado con más de 50,000 luces LED multicolores, 8 kilómetros de cableado y coronado con una estrella Swarovski de 2,7 metros y 400 kilos, cubierta con 3 millones de cristales.
La tradicional ceremonia de encendido tendrá lugar el 3 de diciembre y marcará el inicio oficial de las festividades en Nueva York. El abeto permanecerá encendido hasta mediados de enero.
Una tradición con propósito
Después de las fiestas, la madera del árbol será donada a la organización Habitat for Humanity, que la reutiliza para construir viviendas para familias necesitadas, como ya es costumbre desde hace más de una década.
Judy y Liam estarán presentes el día del encendido, donde verán su árbol iluminar el cielo de Manhattan frente a miles de espectadores y millones de televidentes.
“Es un honor que algo tan personal para nosotros se convierta en un símbolo de alegría para tanta gente”, afirmó Russ.
