Esta semana la escena cultural tiene una protagonista indiscutible: Rosalía, que este viernes lanza su esperado álbum ‘Lux’, una obra que promete romper esquemas musicales y estéticos. La artista catalana, conocida por reinventarse en cada etapa, da un salto más allá en su carrera con un proyecto en el que canta en trece idiomas y explora lo espiritual desde una visión moderna y experimental.
‘Lux’: la reinvención de Rosalía
Tras tres años de trabajo, Rosalía presenta un álbum “completamente distinto” a sus producciones anteriores. En ‘Lux’ fusiona géneros como el flamenco, la ópera y el pop, con letras inspiradas en misticismo, santidad y teoría feminista. La cantante compartió fragmentos de temas como “Sexo, violencia y llantas”, “Sauvignon Blanc”, “Dios es un stalker” y “La rumba del perdón”, confirmando su inquietud creativa y su ambición artística.
El disco llega acompañado de una estética coherente con su nueva visión: un minimalismo místico, donde el color blanco domina. La portada la muestra con un atuendo inspirado en el hábito de una monja, entrelazando símbolos religiosos y conceptuales que refuerzan su narrativa sobre la pureza, la devoción y la liberación.
Una evolución de estilo que narra su carrera
La moda ha sido siempre una extensión del discurso artístico de Rosalía. Desde la estética flamenca de ‘Los Ángeles’ (2017), con volantes, lunares y guiños clásicos, hasta la mezcla urbana y sofisticada de ‘El mal querer’ (2018), su imagen ha ido evolucionando al ritmo de su música.
En la era de ‘Con altura’ (2019), la artista abrazó el estilo “ratchet”, combinando lujo y barrio en una mezcla de logotipos, colores vibrantes y manicura XXL. Luego, con ‘Motomami’ (2022), se adentró en el universo motero, luciendo cuero, cascos y botas altas como parte de su identidad visual.
Hoy, con ‘Lux’, Rosalía apuesta por un minimalismo espiritual, una estética que recuerda a lo sacro y que simboliza una nueva madurez artística. “Es muy importante utilizar la moda para apoyar la narrativa que se quiere contar”, explica Domingo Rodríguez Lázaro, director creativo de Dominnico, quien diseñó parte de su vestuario para ‘El mal querer’.
