El bizcocho cuatro cuartos, conocido como pound cake en inglés, es un postre tradicional que destaca por su textura densa pero esponjosa y su sabor mantecoso. Ideal para acompañar con café, té o frutas frescas, es una receta que nunca pasa de moda.
Ingredientes
- 250 g de mantequilla sin sal, a temperatura ambiente
- 250 g de azúcar
- 4 huevos grandes
- 250 g de harina de trigo
- 1 cucharadita de polvo de hornear
- 1 pizca de sal
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
- 60 ml de leche entera
Preparación
- Precalienta el horno a 180 °C (350 °F) y engrasa un molde para pan o bizcocho.
- Bate la mantequilla con el azúcar hasta obtener una mezcla cremosa y pálida.
- Añade los huevos uno a uno, batiendo bien después de cada adición.
- Incorpora la vainilla.
- Tamiza la harina, el polvo de hornear y la sal. Agrega la mitad de la mezcla seca a la masa, luego la leche, y finalmente el resto de la harina. Mezcla hasta integrar.
- Vierte la mezcla en el molde y hornea durante 50-60 minutos, o hasta que al insertar un palillo salga limpio.
- Deja enfriar 10 minutos antes de desmoldar y enfría por completo sobre una rejilla.
Sugerencia de presentación
Sírvelo solo, espolvoreado con azúcar glas o acompañado de frutas frescas y crema batida.
Hacer un bizcocho cuatro cuartos en casa es una forma sencilla de llenar la cocina con aroma a hogar y tradición. Con ingredientes básicos y un proceso simple, obtendrás un postre que nunca pasa de moda y que siempre deja a todos con ganas de una rebanada más.