Londres y Nueva York son dos de las ciudades más influyentes del planeta, pero esta semana comparten algo más que su diversidad cultural: ambas están gobernadas por alcaldes progresistas, musulmanes y de raíces inmigrantes. El estadounidense Zohran Mamdani y el británico Sadiq Khan representan una nueva generación política que conecta con los ciudadanos desde la experiencia y la empatía.
Dos trayectorias con raíces humildes
Sadiq Khan, de 55 años, hijo de un conductor de autobuses paquistaní, creció en una vivienda social en el barrio londinense de Tooting. Abogado especializado en derechos humanos, fue elegido alcalde de Londres en 2016, convirtiéndose en el primer musulmán en ocupar el cargo.
Zohran Mamdani, de 35 años, nació en Kampala, Uganda, y emigró a Estados Unidos a los siete años. Su carrera política comenzó como activista en Queens, donde asesoraba a familias en riesgo de desahucio, antes de llegar a la Asamblea Estatal de Nueva York en 2020.
Ambos se presentaron como hijos de la clase trabajadora decididos a transformar las ciudades más caras del mundo en lugares más justos y habitables.
Un mensaje progresista compartido
Los dos líderes apostaron por propuestas concretas para aliviar los problemas cotidianos de los ciudadanos: vivienda asequible, transporte accesible y políticas verdes.
Mamdani, que ganó las elecciones con la mayor participación local desde 1969, centró su discurso en la lucha contra el alto costo de vida. Prometió autobuses gratuitos, guarderías públicas y supermercados de bajo precio administrados por la ciudad, financiados mediante impuestos a las grandes fortunas.
Khan, por su parte, construyó su éxito sobre la promesa de un Londres más inclusivo y sostenible. Amplió el transporte público, promovió la vivienda social y reforzó la seguridad con más agentes en la Policía Metropolitana.
Dos símbolos del cambio político
Ambos dirigentes encarnan una ruptura con la política tradicional y una conexión directa con las nuevas generaciones urbanas, que exigen soluciones reales a problemas urgentes.
Khan logró más del 56 % de los votos en su primera elección frente al conservador Zac Goldsmith, miembro de una familia de élite británica. Mamdani, por su parte, derrotó al veterano Andrew Cuomo, exgobernador de Nueva York, con el 50,4 % del apoyo popular.
El futuro de dos capitales diversas
El paralelismo entre Khan y Mamdani va más allá de su religión o ideología. Ambos simbolizan una política más representativa de la diversidad urbana y del espíritu de cambio en dos sociedades cada vez más multiculturales.
Mientras Khan ya ha consolidado su liderazgo con tres mandatos consecutivos, Mamdani apenas comienza su camino. Su reto será mantener el apoyo de una población que, como la londinense, busca esperanza en medio de la desigualdad urbana