En Colombia, la avena no solo se come en hojuelas al desayuno, también se convierte en una bebida fría y deliciosa que se disfruta en las tardes calurosas o como acompañante de las comidas. La avena colombiana es cremosa, ligeramente dulce y perfumada con canela y clavos de olor, lo que la hace reconfortante y refrescante al mismo tiempo.
Ingredientes
- 1 taza de avena en hojuelas
- 5 tazas de agua
- 4 tazas de leche entera
- ½ taza de azúcar (ajusta al gusto)
- 1 ramita de canela
- 2 clavos de olor
- 1 cucharadita de esencia de vainilla
- Una pizca de sal
Preparación
- En una olla grande, pon a hervir el agua con la canela y los clavos de olor durante unos 5 minutos.
- Agrega la avena en hojuelas y cocina a fuego medio, removiendo de vez en cuando, hasta que la avena esté blanda (aprox. 10 minutos).
- Retira la canela y los clavos.
- Incorpora la leche, el azúcar, la vainilla y la pizca de sal. Cocina por 5 minutos más, removiendo constantemente.
- Deja enfriar y licúa la mezcla hasta que quede cremosa.
- Refrigera por lo menos 2 horas antes de servir.
- Sirve bien fría, sola o con hielo.
Consejos
- Para una versión más ligera, puedes usar leche deslactosada o de almendras.
- En algunas regiones se le añade ralladura de limón o naranja para un toque cítrico.
- Si la mezcla queda muy espesa, añade más leche hasta alcanzar la textura deseada.
La avena colombiana es tradición en vaso: un recuerdo de la cocina casera que nunca pasa de moda.