John Cena, una de las figuras más influyentes en la historia de la lucha libre profesional, afronta este sábado uno de los momentos más simbólicos de su carrera en la Capital One Arena de Washington D.C., en el marco de su gira oficial de despedida de la WWE.
El luchador estadounidense, de 48 años, anunció en 2024 que pondrá fin a su carrera como competidor activo a lo largo de 2025, cerrando así más de dos décadas como rostro central de la empresa y referente de la cultura popular global.
Un adiós planificado, no improvisado
La WWE estructuró la despedida de Cena como una serie de apariciones especiales y combates selectos en distintas ciudades, un recorrido que busca rendir homenaje a su legado y permitir a los aficionados despedirse de una de sus máximas leyendas en activo.
Washington es una de las paradas clave de ese itinerario, en un escenario cargado de simbolismo para un luchador que marcó una época completa dentro y fuera del ring.
De promesa a símbolo global
John Felix Anthony Cena Jr., nacido el 23 de abril de 1977 en West Newbury, Massachusetts, debutó en la WWE en 2002 frente a Kurt Angle con una frase que quedó grabada en la historia: “Ruthless Aggression”.
Tras un inicio irregular y con riesgo real de despido, Cena se reinventó como el “Doctor of Thuganomics”, un personaje que mezclaba rap, actitud desafiante y carisma. Esa transformación lo catapultó al estrellato y lo llevó a conquistar su primer Campeonato de Estados Unidos en WrestleMania XX.
En 2005 ganó su primer Campeonato de la WWE y se consolidó como la cara de la empresa durante más de una década.
Un legado dentro y fuera del ring
A lo largo de su carrera, Cena protagonizó rivalidades icónicas con figuras como Randy Orton, Edge, Brock Lesnar, CM Punk y Dwayne “The Rock” Johnson, marcando algunos de los periodos de mayor audiencia y expansión global de la WWE.
Fuera del ring, su impacto es igual de notable. Es el luchador que más deseos ha cumplido en la historia de la fundación Make-A-Wish, con más de 650 solicitudes atendidas, un récord absoluto.
Su transición a Hollywood no rompió su vínculo con la lucha libre. Al contrario, reforzó su estatus como figura transversal del entretenimiento, combinando cine, televisión y apariciones constantes en la WWE siempre que su agenda lo permitió.
“You can’t see me”, una marca eterna
El gesto de la mano frente al rostro y la frase “You can’t see me” nacieron de una broma familiar y terminaron convertidos en uno de los símbolos más reconocibles del deporte espectáculo.
Hoy, ese gesto representa algo más que un eslogan: es la huella de una carrera construida sobre constancia, disciplina y conexión con el público.
El final de un ciclo
La Capital One Arena será testigo de otro capítulo en el adiós de John Cena, un luchador que redefinió el rol del protagonista en la WWE y elevó la lucha libre a una dimensión cultural global.
Cuando finalmente suene la campana por última vez en esta gira, Cena dejará de ser competidor activo, pero su figura quedará instalada de forma permanente en la historia de la WWE y en la memoria colectiva de varias generaciones de aficionados.










