La avena remojada, también conocida como overnight oats, se ha convertido en una opción popular para quienes buscan desayunos prácticos, nutritivos y deliciosos. Se prepara la noche anterior y por la mañana está lista para disfrutar, sin necesidad de cocinar. Además, es personalizable con frutas, semillas, especias y más.
Ingredientes básicos (1 porción)
- ½ taza de avena tradicional (no instantánea)
- ½ taza de leche (puede ser vegetal: almendra, coco, soya, etc.)
- ¼ taza de yogur natural o griego (opcional, para más cremosidad)
- 1 cucharadita de semillas de chía (opcional, pero muy nutritivas)
- Endulzante al gusto: miel, stevia o jarabe de maple
- Fruta fresca para servir (fresas, plátano, arándanos, mango, etc.)
Preparación
- Combina los ingredientes
En un frasco o recipiente con tapa, mezcla la avena, la leche, el yogur (si lo usas), las semillas de chía y el endulzante. - Mezcla bien
Revuelve todos los ingredientes hasta que estén completamente integrados. - Refrigera toda la noche
Cubre y coloca en el refrigerador durante al menos 6 horas, preferiblemente toda la noche. - Agrega toppings y disfruta
Por la mañana, revuelve nuevamente y agrega la fruta fresca y otros toppings como nueces, mantequilla de maní, canela o coco rallado.
Variaciones populares
- Avena con manzana y canela: Agrega trozos de manzana, canela en polvo y un poco de nuez.
- Versión tropical: Usa leche de coco, mango picado y coco rallado.
- Estilo postre: Agrega cacao en polvo, chispas de chocolate y plátano.
Beneficios nutricionales
- Rica en fibra, ayuda a la digestión.
- Aporta energía sostenida gracias a los carbohidratos complejos.
- Fuente de proteína si se usa yogur o leche vegetal enriquecida.
- Ideal para personas con poco tiempo en la mañana.