Estados Unidos abre este lunes las celebraciones del Mes de la Herencia Hispana 2025, en un contexto de creciente tensión social por las redadas migratorias que han golpeado con dureza a la comunidad latina.
“Estamos pasando por una de las épocas más difíciles para los hispanos en este país”, afirma Nicolás Kanellos, profesor de la Universidad de Houston. El académico, de raíces puertorriqueñas, asegura que incluso teme por él y su hijo debido a la discriminación racial en Texas, un estado que se ha alineado con las políticas migratorias del presidente Donald Trump.
Kanellos compara el clima actual con episodios históricos como la Gran Depresión de 1929 y el operativo “Espaldas Mojadas” de los años cincuenta, pero considera que ahora los métodos son “más intensos y peligrosos”, con prácticas que, según él, evocan regímenes autoritarios.
Janet Murguía, presidenta de UnidosUS, advierte que la situación afecta no solo a los inmigrantes, sino también a la confianza en las instituciones y la democracia. “Los derechos civiles básicos de todos están en riesgo”, subraya.
En el ámbito económico, el profesor Raúl Hinojosa (UCLA) prevé que el crecimiento del PIB latino se frene en 2025 tras alcanzar un récord de 4,1 billones de dólares en 2023. Según el académico, esta desaceleración impactará directamente en la economía general de Estados Unidos.
El panorama se agrava con la eliminación del español en plataformas oficiales y con la redistribución de distritos en Texas, que, según demandas recientes, afectará de forma desproporcionada a las comunidades latinas.
Pese a las dificultades, Kanellos recuerda que la presencia hispana en estas tierras es más antigua que la de los colonos fundadores. Murguía, por su parte, hace un llamado a la acción: “No vamos a quedarnos de manos cruzadas mientras nos quitan derechos. Cuando nuestra comunidad prospera, prospera toda la nación”.
