El eggnog tradicional es una de las bebidas más emblemáticas de la temporada invernal en Estados Unidos. Cremoso, dulce y delicadamente especiado, combina leche, crema, yemas de huevo y un toque de nuez moscada que le da su sabor inconfundible. Puede servirse solo o con un toque de ron, bourbon o brandy, según la ocasión.
Su textura aterciopelada y su aroma cálido lo convierten en el acompañamiento ideal para reuniones familiares y noches festivas. Prepararlo en casa es sencillo y el resultado supera por mucho cualquier versión comercial.
Ingredientes (6–8 porciones)
- 4 tazas de leche entera
- 1 taza de crema espesa (heavy cream)
- 6 yemas de huevo
- ¾ taza de azúcar
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
- ½ cucharadita de nuez moscada rallada
- 1 pizca de canela
- ½ a 1 taza de bourbon, ron o brandy (opcional)
- Nuez moscada extra para decorar
Preparación
1. Prepara la base
- En una olla, calienta la leche y la crema a fuego medio hasta que esté caliente, sin llegar a hervir.
- En un tazón aparte, bate las yemas con el azúcar hasta que la mezcla esté pálida y espesa.
2. Templa los huevos
- Agrega lentamente una parte de la mezcla caliente de leche al tazón de yemas, mezclando constantemente.
- Vierte toda la mezcla de vuelta a la olla.
3. Cocina hasta espesar
- Cocina a fuego bajo, revolviendo constantemente, hasta que la mezcla espese ligeramente y cubra la parte posterior de una cuchara.
- No permitas que hierva para evitar que las yemas se coagulen.
4. Aromatiza y enfría
- Retira del fuego y añade la vainilla, la nuez moscada y la pizca de canela.
- Si deseas agregar licor, hazlo ahora.
- Deja enfriar y refrigera al menos 4 horas o toda la noche para que tome cuerpo y sabor.
5. Servir
Sirve frío, decorando cada vaso con un toque de nuez moscada recién rallada.
Consejos
- Para una textura más espesa, añade una yema extra.
- Para una versión sin alcohol, simplemente omite el licor; queda igual de cremoso.
- Si quieres más aireado, bate 2 claras a punto de nieve e incorpóralas justo antes de servir.
El eggnog tradicional es una bebida cálida y festiva que combina sencillez con un sabor clásico y reconfortante.









